Actividad 5
m4a
¿Qué le propone Fluxus al arte?
¿Qué nos propone como espectadores?
¿Y cómo artistas?
En la década de los 60 surgió “Fluxus”, que en latín significa “flujo”, un movimiento de artes visuales que incluye música, literatura y danza. Fluxus se caracterizó por estar en contra del “objeto artístico” convencional como mercancía y se proclamó a sí mismo como un movimiento artístico sociológico que se expandió por Europa, Japón y Estados Unidos.
El colectivo rompió con el esquema tradicional de los conciertos placenteramente auditivos, porque se tomaba cualquier objeto, lo convertía en instrumento y creaba música con él, y venían tonos naturales o el caos. Fluxus-Arte-Diversión debía ser simple, entretenido y sin pretensiones y tratar de temas triviales sin dominar técnicas y ensayos ni aspirar a valor institucional o comercial.
Rompiendo con los esquemas tradicionales del arte, fluxus propone toda una forma distinta de ver el arte, donde cada undividuo constituye una obra de arte en sí mismo, creando una concepción nueva de entender que la vida es una composición artistica global.
El espectador se vuelve participe de esta obra de arte, y deja de ser un mero observador para volverse el sujeto artistico mísmo, posicionandolo en un lugar al que la gente común nunca se le habia dado lugar. Asi como el dadaismo, la obra de arte deja de ser un “objeto artistístico” pieza de museo, y se transforma en este nuevo concepto donde todos podían ser participes, rompiendo con esa distancia que la academia habia creado entre la obra, el artista y el espectador; con fluxus, estos tres componentes del arte se podian acomodar y desacomodar a gusto. Imaginando las estructuras viejas donde el artista estaba por encima, la obra por el medio y el espectador por abajo, la nueva forma propuesta de ver este esquema posiciona a estos tres componentes uno al lado del otro, pudiendo reordenarse de la forma que se quisiera.
Artista

Obra

Espectador
Artista
Obra
Espectador
FLUXUS